El principal mes del verano es julio por lo que habitualmente las temperaturas son muy altas. El exceso de calor puede perjudicar a los árboles frutales y hortalizas de nuestro huerto por lo que será vital un aumento del riego.
Se deberá regar cada pocos días, procurando hacerlo durante el día. Durante esta temporada no se aconseja plantar nada, pero sí que puede empezar con la zanahoria, el puerro o las espinacas. Si vives en una zona mas fría incluso puedes sembrar coliflor, brócoli o coles de Bruselas.
Las cosechas que se van recogiendo este mes son: pimientos, tomates, judías y frutas como nectarina, melón, pera o melocotón.
Si los cuidados son los adecuados seguramente la recolecta sea abundante para poder compartir con familiares y amigos.
Tipos de riego
Para suministrar agua en los huertos se suelen utilizar las siguientes modalidades de riego:
- Por surcos. Consiste en inundar el espacio que queda entre las plantaciones.
- Por goteo. Es el que más se emplea porque resulta ideal para las hortalizas.
- Por aspersión. Se tendrá especial cuidado porque puede favorecer la aparición de hongos.