Toda la información que circula o está publicada en Internet sobre una persona es lo que se conoce como identidad digital. Dicho de otra forma, son los datos que publica la propia persona o que se hacen públicos por causas ajenas: otra persona, periódicos, organismos…
Precaución
Partiendo de la base que se puede encontrar mucha información en un buscador hay que ser cautelosos con lo que subimos a la red. Desde que está en Internet perdemos su control. Hablamos de las publicaciones en redes sociales, mensajería instantánea, publicaciones en blogs, foros, etc.…
Mayores riesgos
Sin duda hay que tener especial cuidado con hacer públicos:
- Datos personales. Como el DNI o pasaporte para evitar fraudes suplantando nuestra identidad.
- Correo electrónico. Si deja de ser privado se recibirán más mensajes de spam y con intento de engaño.
- Datos bancarios. A la hora de realizar compras online hay que revisar bien antes la fiabilidad de la página web. Eso sí, NUNCA se facilitarán este tipo de datos por correo electrónico.
- Ubicación geográfica. Publicar los lugares que frecuentamos o cuando estamos ausentes de casa podría pasarnos factura.
- Fotografías y vídeos. Este tipo de material ofrece demasiada información sobre nuestra vida y es especialmente delicado cuando se trata de menores.
Fuente: Oficina de Seguridad del Internauta
