Rotundamente sí. Actualizar y mantener al día los equipos informáticos que utilizamos nos salvará de tener que lamentar problemas futuros. Se entiende por actualizaciones aquellas modificaciones o añadidos que se hacen sobre los sistemas operativos o aplicaciones que ya están instalados en un dispositivo que tienen una función clara: mejorar tanto la funcionalidad como la seguridad.
Recomendaciones
Debes saber que si no actualizas correctamente los dispositivos te expones a los siguientes riesgos: robo de información, pérdida de privacidad, perjuicio económico, suplantación de identidad, etc. Para evitar las anteriores situaciones es fundamental:
- Revisar el estado de actualización de dispositivos y aplicaciones.
- Elegir la opción de actualizaciones automáticas cuando sea posible.
- Instalar las actualizaciones tan pronto como se publiquen, sobre todo en el caso de los sistemas operativos, navegadores y programas antivirus.
- Prestar atención a las aplicaciones que se instalan, desconfiando de las fuentes no fiables y vigilando las opciones marcadas.
- No usar aplicaciones y sistemas operativos antiguos que no están actualizados.
Precauciones
Existen ciertos sitios de Internet y ciertas aplicaciones para instalar actualizaciones falsas. Fíjate siempre en que la actualización proceda de una fuente de confianza, es decir, de los fabricantes y desarrolladores de los dispositivos o el software. Otro consejo clave es huir de los sitios que nos ofrecen aplicaciones o servicios gratuitos o muy baratos.
Por último, hay que señalar que tener una aplicación actualizada no significa tener la última versión. Es decir, los fabricantes también comercializan mejoras de las antiguas versiones. De este modo, se puede tener instaladas y actualizadas herramientas sin ser las últimas del mercado.
Fuente: Oficina de Seguridad del Internauta
