Hemos hablado mucho en este blog de la muerte, de lo que se siente, lo que sienten nuestros familiares, lo que le pasa a nuestro cuerpo o simplemente del fin mismo de la vida.
Decía Antonio Machado “la muerte es algo que no debemos temer porque, mientras somos, la muerte no es, y cuando la muerte es, nosotros no somos”.
Pero la verdad es que cuando llegue el último momento y recordemos nuestros actos, quizás nos arrepintamos de algunas cosas.
Los arrepentimientos más comunes
- No haber sido fiel a mí mismo: a todos nos pasa que en muchas ocasiones nos hemos visto en la necesidad de tomar decisiones coartados por los demás, pero cuando la gente se da cuenta de que su vida está terminando es fácil comprobar que muchos sueños no se han cumplido.
- Haber trabajado tanto: la mayoría de las personas lamentaban profundamente haber pasado tanto tiempo de sus vidas en el trabajo.
- No expresar mejor sus sentimientos: hay personas que reprimen sus sentimientos para mantener la paz con los demás, pero lo que más les pesaba era la sensación de no haberlo intentado.
- Dejar de lado a los amigos: los trabajos y las vidas conyugales hacen que se dejen de lado los amigos, muchas personas se arrepienten de no haber dedicado el tiempo suficiente a sus amigos y cuando están a punto de morir los extrañan.
- No haber sido más feliz: muchas personas, se dan cuenta de que nunca fueron ellos mismos, de que se habían quedado atrapados en patrones y hábitos que los paralizaba. Se arrepienten de no reírse más o de no hacer todo tipo de tonterías.
Fuente: elconfidencial.com
