¿Emprender solo o en compañía?

¿Emprender solo o en compañía?

A la hora de montar un negocio la primera decisión tiene que ver en si se hace en solitario o junto a otros. En el primer caso, emprender solo, se tiene total libertad para decidir mientras que hacerlo en compañía ofrece la posibilidad de compartir ideas y responsabilidades. ¿Qué es lo mejor?  Expertos que estudian la creación de empresas reflexionan acerca de este tema.

Rodearse de especialistas

Según los recursos económicos y humanos se podrá subcontratar empresas para determinadas áreas de actividad como pueden ser asesoría, selección de personal, informática…O, por otro lado, contar con personales cualificados para las áreas propias de la actividad a la que se dedica la empresa. Además, cuando no se tiene conocimiento sobre algún tema en concreto es mejor externalizar la gestión para evitar errores.

Apoyo financiero

Uno de los aspectos fundamentales por el que las personas se decantan a formar una empresa con socios es la mayor inversión de capital. Sin embargo, hay quien dice que si esa relación no es muy sólida podría ocasionar discusiones y lo que es peor: generar mala reputación de la empresa para acabar por separado.

Quien apuesta por el emprendimiento en compañía debe tener en cuenta que los socios deberán complementarse en lo que se refiere a capacidades y compartir una misma filosofía de negocio con objetivos idénticos. Conocer muy bien al socio o socios será primordial.

Fidelizar empleados

Otra opción es asociarse con trabajadores que ya están en una empresa. No tiene que ser precisamente con la figura de socios, pero sí disponiendo de participaciones. De este modo, aportarán ideas y ayudarán en la toma de decisiones.

Ser autónomo o ser una sociedad

Si tu previsión es el crecimiento futuro de tu negocio debes saber que es más conveniente constituirte en sociedad porque seguramente querrás ampliar el capital y no tener limitaciones de socios. Además, a la hora de tributar por IRPF existen diferencias que deben ser valoradas para dar con la opción más beneficiosa a efectos fiscales. Nos referimos al impuesto progresivo que consiste en pagar más impuestos a mayor volumen de rendimientos y que resulta más negativo para el autónomo que para una sociedad.

Fuente: Emprendedores