Las empresas están conformadas por personas que desempeñan unas labores específicas que juntas proporcionan un servicio, un producto o un bien a un cliente. En cuanto al plan estratégico es una herramienta que permite que todas las tareas se realicen a la par y complementando unas a otras. De este modo se puede crear un programa operativo que logre el orden y el correcto direccionamiento de los empleados hacia los mismos objetivos empresariales.
El plan estratégico nos permite definir acciones como:
- Determinar la dirección: de la empresa y también la de cada trabajador para conseguir llegar al objetivo.
- Definir la situación actual: realizando un análisis sobre la compañía conoceremos debilidades, fortalezas, oportunidades y posibles amenazas.
- Formular estrategias: es importantísimo establecer cómo llegar a las metas trazadas. Se empieza describiendo las metas intermedias para ir avanzando hasta llegar al objetivo final.
Ventajas
- Obliga a tener los objetivos siempre presentes, implicando a los trabajadores para que se acerquen a las metas propuestas.
- Consigue un refuerzo de los principios de visión, misión y estrategias.
- Mantiene el enfoque en el futuro y el presente.
- Fomenta la comunicación interdisciplinaria.
- Permite mejorar el desempeño de la organización, facilitando la acción de dirección y liderazgo.
- Facilita una gestión eficiente, lo que mejora la eficiencia productiva y la calidad de vida de las personas.
- Favorece a la dirección unificar esfuerzos y expectativas colectivas.
- Contribuye a la creación y definición de valores como: compromiso, calidad, desarrollo humano, innovación, creatividad, comunicación, liderazgo…
Todas las empresas deben implementar el uso de un plan estratégico que les permita definir hacia dónde ir y qué estrategias seguir. Sin un plan estratégico, cada trabajador va por libre sin saber que propósitos se quieren alcanzar.
Fuente: Soluciones Empresariales CIMD