Con el avance de las nuevas tecnologías se abren nuevas oportunidades para las empresas. Es lo que se conoce como digitalización o transformación digital para adaptarse a los cambios de mercado. Estar al día en este tema mejora la competitividad de un negocio y aumenta su valor. De ahí también la importancia de que el directivo tradicional vaya mudando las herramientas y características para dominar los retos tecnológicos.
Se puede decir que estamos ante un cambio de mentalidad debido a realidad digital que requiere de una inversión por parte de las organizaciones para desarrollar las competencias necesarias de las personas.
Aunque cada vez son más las empresas que inician su proceso de digitalización, la gran parte de los directivos todavía no dispone del talento necesario que garantice el éxito de esta transformación. Entre las habilidades y aptitudes que deberá tener el líder actual destacan: saber gestionar los cambios, capacidad analítica y de anticipación o conectividad.
Regla 80/20
No se trata de sustituir las habilidades tradicionales que se asocian al liderazgo, sino que se recomienda la aplicación de la regla 80/20. Esto significa contar con un 80% de aptitudes de liderazgo tradicional y un 20% de competencias del nuevo management.
Adaptabilidad, perseverancia y visión forman parte de las características de un líder tradicional que siguen siendo imprescindibles. Sin embargo, se le deben añadir el espíritu intraemprendedor, la capacidad de aprendizaje, las ideas innovadoras, la curiosidad y habilidad para descubrir. Así se podrá ir adquiriendo el nuevo perfil tan necesario para liderar una empresa en este entorno digital que avanza a gran velocidad.
Fuente: DIR&GE
