En la vida no todas las historias tienen un final feliz, diariamente la muerte nos arrebata a personas que queremos. Durante el proceso de duelo, hay personas que hacen lo inimaginable a causa del dolor y el amor que sienten tras la muerte de un ser querido.
En Chihuahua (México), se encuentra LA POPULAR (La casa de Pascualita), local en el que se venden vestidos de novia desde hace más de 70 años. Este local se ha convertido en un referente en la ciudad, no solo por sus vestidos, sino por el misterioso maniquí que tiene la tienda, conocido como La Pascualita.
La primera vez que apareció en el escaparate fue el 25 de marzo de 1930. Tenía pelo natural, ojos vidriosos y el color de su piel enseguida llamaron la atención de los transeúntes, que la empezaron a llamar “Pascualita” por el gran parecido que tenía con al dueña de la tienda. En poco tiempo el maniquí se ganó el apodo de “la novia más bonita de Chihuahua”.
Todo parecía normal, hasta que en los 70 comenzaron ciertos rumores en los que se afirmaba que la novia de cera cobraba vida y se movía de noche cuando no había nadie en el local o le sonreía a algunas personas.
Se especulaba con que el maniquí era el cadáver de una mujer embalsamada o incluso, se afirmaba que al fallecer, el alma de la dueña de la tienda se había apoderado de ella.
Pero había otra historia que ganó más aceptación. En ella se afirmaba que era la hija mayor de los dueños de la tienda, que había muerto en extrañas circunstancias. Era una joven admirada por su belleza y también se la conocía como “Pascualita”.
Del mismo modo que había hecho con su esposa, el padre de Pascualita realizó el vestido para la boda de su hija. Pero todo cambió cuando la joven fue atacada por una viuda negra el día de su boda y al llegar al altar, cayó muerta en los brazos del que sería su futuro esposo.
Nadie sabe cómo fue su entierro, solo se rumorea que el maniquí que se encuentra en al tienda “La Popular” se parece muchísimo a la hija muerta. La historia aún se pone más interesante con el hecho de que antes de que el padre de la chica muriera, solamente él podía cambiarle el vestido al maniquí.
Fuente:increíble.co