Los padres deben preparar y dotar a sus hijos de las habilidades necesarias para que puedan sobrevivir sin ellos, decirle a un niño que alguno de sus padres tiene una enfermedad terminal es una de las cosas más difíciles, dice Ryan Loiselle, directora del programa de Friends Way, un centro de duelo para niños y ex trabajadora social de cuidados paliativos.
Loiselle, recomienda que cuando los padres descubren que les queda poco tiempo de vida, que se lo cuenten a sus hijos. Son muchos los padres que dicen: “No quiero llorar enfrente de mis hijos’”, dice Loiselle. “Por favor, demuestren emoción frente a los niños porque así, les enseñan esas habilidades sanas para afrontar las cosas y modelan el comportamiento apropiado”.
Es importante ofrecer a los niños la información lo más precisa posible y apropiada a su edad, después hay que darle al niño un tiempo para que pueda procesar y hacer preguntas que necesite. En muchos casos, los niños se van a jugar y parece como que no les importa, pero posiblemente esa es una forma que ellos tienen para procesar la información.
Loiselle aconseja a los padres que tengan especial cuidado sobre cómo hablan sobre el concepto del cielo y la vida después de la muerte cuando los niños son menores de 10 años. También hay que explicar al niño cómo cambiará su casa y su vida una vez esa persona ya no esté.
Además hay que preguntar al niño si quiere estar con el padre cuando muera o si quiere despedirse e irse de la casa con algún familiar, es importante darles la opción, ya que eso les dará el poder de determinar hasta donde son capaces de llegar.
Fuente:infobae.com
