El brócoli es una de las verduras que causa más furor. Tanto para bien o para mal porque se caracteriza por un sabor fuerte y una textura particular. Como todas las verduras y hortalizas es muy saludable y debe incluirse en nuestra dieta diaria. Proteínas, fibra, vitamina C, vitamina K, calcio, fósforo y potasio son sus principales nutrientes.
A la hora de comer brócoli debes…
Elegir bien el producto
Verde oscuro es el color perfecto del brócoli. Por lo tanto, evita aquel que ya tenga un tono amarillento en los floretes. Fíjate también en el tallo ya que si está blando está empezando a perderse.
Limpiar correctamente
Elimina la parte más dura de los tallos, pero no del todo y divide el brócoli en floretes. Revisa bien para cortar las zonas dañadas o decoloradas. Tras tener todo cortado coloca en un colador para lavar bajo abundante agua.
No tirar las hojas
También son ricas en vitamina A y C.
Hervir lo justo
En 10 o 15 minutos en agua salada hirviendo el brócoli se cocina. Al vapor incluso con menos tiempo. Si optas por el microondas variará en función de la cantidad y la potencia.
Reutilizar el agua de la cocción
Tirar el agua después de hervir el brócoli es un error porque contiene nutrientes y vitaminas. Es recomendable para elaborar caldo para una sopa, un arroz o para preparar pasta con brócoli. Durante unos días se guarda perfectamente en la nevera.
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Fuente: LA VANGUARDIA