La Xunta de Galicia ha convocado varias ayudas para la incorporación de jóvenes a actividades agrarias con la intención de mantener la población activa en el medio rural. En las últimas convocatorias han sido casi 1.400 los solicitantes por lo que se puede observar que el campo vuelve a ser una opción de trabajo.
Aunque lo ideal sería que las personas que se dedican al campo lo hiciesen por vocación, la realidad es otra: ausencia de relevo en las explotaciones y la falta de oportunidades en las ciudades. No obstante, los datos hablan de que se vuelve a apostar por lo rural para ganarse la vida. El año pasado se registraron 804 solicitudes y en el actual el número asciende a 546, según indica la Consellería de Medio Rural.
Son tres las líneas de ayuda para fomentar el sector agrario entre los jóvenes: la incorporación directa, los planes de mejora y el desarrollo de pequeñas explotaciones en el campo.
Condiciones
Uno de los requisitos para poder se beneficiario de las ayudas es contar con formación. Aquellas personas que no tenga una titulación en producción agraria tendrán que realizar un curso básico sobre temas sanitarios y cuidado animal. En cuanto al límite de edad, solo podrán acceder a estas subvenciones los menores de cuarenta años. Por otro lado, los beneficiarios deberán comprometerse a no abandonar las explotaciones al menos cinco años desde la concesión de la ayuda.
Nuevas vías
Las formas tradicionales de agricultura y ganadería han dejado paso a nuevas vías de negocio. Algunos ejemplos de éxito son: la producción ecológica, las visitas a granjas, la venta a través de Internet…El caso de Hortícolas Javier Miranda es el de una empresa que nació de la mano de un joven que permaneció en su pueblo, Riotorto, para explotar sus tierras y ahora produce y vende productos hortícolas de gran calidad y sabor.
Fuente: La Voz de Galicia