La empresaria rusa de 30 años Eugenia Kuyda ha resucitado a su mejor amigo, muerto en un accidente. Esta empresaria vive en San Francisco y encuentra un rato todos los días para charlar con su amigo muerto. Eugenia, gracias a la inteligencia artificial se ha creado un avatar y consiguió una versión digital de su amigo, un avatar con quien seguir hablando, en definitiva, un chatbot con la personalidad de Roman, su amigo, con sus bromas, sus frases hechas, sus preguntas típicas…
Eugenia es la fundadora de una start-up de inteligencia artificial llamada Replika. Los programadores volcaron cerca de ocho mil mensajes, correos, conversaciones y comentarios en las redes del amigo de Eugenia muerto, para crear un alter ego digital.
En un primer momento las conversaciones eran insustanciales, pero gracias a los algoritmos del deep learning, las máquinas pueden aprender solas y consiguieron que “Roman” sea cada vez más listo, más gracioso y más auténtico. Tanto que ahora es una aplicación para iPhone con el nombre de Luka y que cualquiera puede descargarla y hablar con él.
El investigador del Instituto de Internet de la Universidad de Oxford, Carl Öhman, estudia las cuestiones éticas derivadas del uso post mortem de todo lo que hemos subido a Internet: fotos, vídeos, textos, correos… porque en la nube vivimos para siempre y eso tiene consecuencias
En 2098 habrá en Facebook más perfiles de personas muertas que vivas, se convertirá en el camposanto más grande del mundo, con millones de tumbas digitales.
Fuente: xlsemanal.com
