En el año 1996 el escalador indio Tswang Paljor, perdió la vida en el Everest, durante casi 20 años, su cuerpo conocido como Green Boots (botas verdes), ha descansado cerca de la cumbre, del lado norte de la mítica montaña. Pero no está sólo, a su lado hay más de 200 cuerpos.
Mientras estuvo su cadáver en las heladas piedras, su figura congelada se convirtió en mítica. Sus botas verdes aparecían y desaparecían dependiendo del tiempo. Cuando había poca nieve, los escaladores tenían que pasar por las piernas extendidas de Paljor en su camino hacia la cumbre. Él como tantos otros, servían como punto de referencia para los aventureros.
Entre el 10 y el 11 de mayo de 1996, ocho personas quedaron atrapadas en una tormenta de nieve en el Everest, murieron mientras intentaban descender de la cumbre, entre ellos estaba Paljor. Otras 12 personas más murieron ese año intentando alcanzar la cima.
Pasados los años, el cuerpo de Paljor con sus botas verdes no ha pasado desapercibido para el resto de montañeros que subían por el lado norte, allí encontraban el cuerpo encogido en la cueva de piedra caliza a 8.500m.
No se sabe con exactitud los cuerpos que permanecen en el Everest, más de 200 cadáveres de escaladores y sherpas enterrados bajo la avalancha de nieve y expuestos en las rocas. La mayoría están ocultos pero algunos sirven como marcas de peligro o señales de la ruta que les llevará a la cumbre.
Fuente:es.gizmodo.com
