Comprar un coche es una de las decisiones más importantes en cuanto a compra se refiere. Se trata de una gran inversión, por lo que sopesar todas las opciones debe ser un paso a seguir. De igual forma, el proceso de elegir una compañía de seguros no es menos necesario. Obligación legal en España, a veces es complicado decantarnos por una aseguradora, ya que las diferencias en prestaciones son similares. Lo mismo puede llegar a ocurrir con los precios. Sin embargo, es importante leer al detalle todos los pormenores, por lo que la letra pequeña no puede ser descuidada.
Tipos de compañía de seguros de automóvil
Lo primero que se debe tener en cuenta es el tipo de compañía de seguros que se desea. Para ello, conocer el trato con el cliente es primordial. Por ello, se hallar dos tipos: las denominadas «tradicionales» y las de «venta directa».
- Tradicionales: su principal diferencia radica en la presencia física de entidades y agentes comerciales repartidos en diferentes ubicaciones de la geografía. A pesar del precio más elevado, es posible llamar o contactar por medios digitales, así como asistir personalmente a sus oficinas ante cualquier duda y/o incidencia, lo que las convierten en una de las opciones favoritas de todos los asegurados.
- Venta directa: no existen intermediarios, por lo que el trabajo de las corredurías de seguros es inexistente. Tampoco hay entidades físicas y el trato con el usuario se lleva a cabo únicamente por medios más vanguardistas, como el correo electrónico o la página web, acompañados de los teléfonos. Como consecuencia, el precio es menor. La comodidad es mayor, tal y como lo es la desconfianza.
Factores influyentes
No es de extrañar que para la personalización del servicio y del coste se requieren una serie de datos. A pesar de esto, se debe desconfiar ante la solicitud de información innecesaria. En el presupuesto, se tiene en cuenta:
- Edad.
- Tiempo del carnet de conducir.
- Titular del vehículo.
- Conductores habituales del mismo.
- Sexo.
- Lugar de estacionamiento: vía pública, garaje comunitario o individual.
- Tipo de vehículo.
- Antigüedad del mismo.
- Kilometraje anual.
Las pólizas y sus coberturas
Otro punto esencial es el del tipo de seguro a contratar, así como los servicios incluidos. Se puede diferenciar entre las primas a todo riesgo con franquicia, a todo riesgo, terceros ampliados y terceros. El punto en común entre todos ellos es la asistencia en carretera, el seguro de Responsabilidad Civil Obligatorio, así como la defensa jurídica, entre otros.
Lo que hace variar el importe a desembolsar son las coberturas adicionales, como la rotura de lunas, robo, incendio, vehículo de sustitución durante la reparación, transporte en caso de avería…
Estudiar todas las opciones
Compara siempre todas las ofertas. Todas las aseguradoras estarán deseando tenerte entre sus filas. Tómate tu tiempo y revisa todas las coberturas desde el minuto cero de entrada en vigor de la póliza. Con esto, no olvides analizar todas las opiniones vertidas en diferentes medios, como los foros, o las experiencias de familiares y/o amigos.
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