Cocinar a la plancha es una de las técnicas culinarias más sanas para conseguir alimentos bajos en grasas y calorías. En el caso de las verduras y las hortalizas, es la forma perfecta para que nos resulten más sabrosas y apetecibles, en comparación con la cocción al vapor. Además, los nutrientes se conservarán mejor.
Para hacer una deliciosa y saludable parrillada de verduras no son necesarios muchos útiles: una buena plancha o parrilla, productos frescos -de calidad y de temporada-, sal y aceite virgen extra.
Recomendaciones
Aunque casi todas las hortalizas se pueden hacer a la plancha, las más habituales son: puerros, tomates, calabacines, berenjenas, zanahorias, espárragos, pimientos y setas. También se pueden usar las patatas para dar un toque diferente a tus platos.
A la hora de cocinar, si quieres que cada pieza quede a rayas y muy bien sellada tendrás que calentar mucho la plancha, sartén o parrilla antes de colocar las verduras. Recuerda que no es necesario utilizar mucho aceite, bastará con unas gotas que extenderemos con un pincel o brocha. Es suficiente para conseguir que los ingredientes no se peguen en la superficie utilizada.
Corte
Dependiente del tamaño y el grosor de cada hortaliza, se tardará más o menos en estar bien cocinadas. Cortar en rodajas o partir por la mitad de manera longitudinal es lo más común. Ten en cuenta que cuanto más finas, menos minutos son necesarios.
Tiempo
La preparación a la plancha no tiene mucho secreto. Como acabamos de apuntar justo unas líneas arriba, el grosor de cada hortaliza y la potencia del fuego influirá en el tiempo requerido. Pero para que te hagas una idea en un tamaño normal:
- Berenjenas, patatas y pimientos: doce minutos (seis por cada lado).
- Calabacín: dos o tres minutos si es en rodajas y ocho o diez si es en sentido longitudinal.
- Cebollas, champiñones y tomates: de seis a ocho minutos (tres o cuatro por cada lado). En cuanto se dore su superficie estarán listas porque tienen gran cantidad de agua y son más blandas.
Trucos
- Añadir la sal al final.
- Cuanto más finas se corten las verduras, más jugosas quedarán.
- No pinchar los alimentos para que no se desparramen los jugos internos.
Fuente: Directo al paladar
