Explicado los conceptos básicos sobre las ADR —Alternative Dispute Resolution—, un método alternativo al sistema judicial nacido en los años 30 en EE.UU., conviene centrarnos ahora en una de sus fórmulas: la mediación.
La Asociación Española de Mediación —ASEMED— la define como:
El proceso por el que una persona, independiente e imparcial, ayuda a otros a encontrar soluciones para resolver sus divergencias, evitando acudir a los juzgados para resolver el conflicto surgido.
Cabe resaltar que se trata de un procedimiento completamente voluntario, es decir, las partes involucradas deben ponerse en manos de un profesional siempre por decisión propia. Esta metodología de resolución de conflictos tiene una serie de ventajas.
Ventajas de la mediación
- Proceso más económico que el sistema judicial.
- Limita el coste temporal y el monetario, con un procedimiento más ágil y rápido que el anterior.
- Ambas partes pueden obtener soluciones válidas.
- Posición de igualdad de los implicados.
- Ofrece soluciones adaptadas y personalizadas.
- Favorece la comunicación.
- No es necesaria la presencia de un abogado ni de un procurador.
- Ambas partes pueden resultar beneficiadas.
Características clave de cualquier mediación
- La participación debe ser voluntaria, pudiendo ser abandonado el proceso en cualquier momento.
- Es confidencial, tanto las conversaciones como los materiales aportados.
- Se precisa de una figura imparcial y neutral cualificada.
No vale cualquier mediador
La tercera parte, la mediadora, debe ser una persona cualificada para tal fin, con formación específica en psicología, derecho, trabajo social… Por supuesto, nunca está de más repetir que debe ser totalmente imparcial y neutral con el objetivo de conseguir un acuerdo entre las partes enfrentadas, con el compromiso de mantener la confidencialidad de las sesiones.
La principal diferencia con otros métodos radica en que nunca se sitúa en posición superior, no da asesoramiento jurídico y tampoco juzga.
Cualquier acuerdo debe proceder de las anteriores. El mediador tan solo hará preguntas y guiará a sus clientes por determinados aspectos, pero cada determinación deberá ser determinada por estos mismos por mutuo entendimiento.
¿Cómo es el proceso de mediación en Biriska?
Biriska cuenta con los mejores profesionales de cada sector. Sin embargo, en caso de la aparición de algún tipo de desacuerdo con el cliente o con el usuario, este puede reclamar tras haber registrado previamente la factura o contrato del servicio. Intentados varios medios, si estos fracasan, se ofrece un servicio de mediación con el objetivo de evitar acudir a la justicia.
Durante este proceso se utilizará el presupuesto, el contrato y el informe del experto previamente enviado a estudiar cada una de las particularidades del acuerdo. El mediador escucha, ayuda, guía. La voluntad la ponen nuestras empresas.
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